UNA FORMA DE VER EL TENIS
Publicado: Sab Dic 08, 2012 1:57 pm
AL TENIS NO SE JUEGA CON MANDARINAS.
de David Creus Carrasco,
Ahora, después de muchos años gritando y gritando que los niños que practican tenis, lo ampliaría a muchos más deportes de base, merecían mucho más.
Mi garganta, ya no me deja expresar aquellas palabras descompuestas que un día me llevaron por un viaje de decepción, al ver el resultado de las mismas.
Durante muchos años, unas veces desde dentro de las pistas lanzando bolas y otras desde fuera, acompañando a los enanos para darles un alivio emocional en sus partidos, descubrí que esto del tenis era maravilloso para formar deportistas y sobre todo personas.
Mi entrenador, el Señor Pérez, (descanse en Paz), cuando yo intentaba imitar a mis ídolos de la época, siempre me decía que el tenis era un maravilloso ejemplo para ser simplemente mejor persona.
Siempre intentaba hacerme ver, que todo lo que envolvía una buena victoria, era como cuando se adorna en estas fechas un árbol de navidad.
Un abeto es un abeto, un árbol que debes cuidar todo el año para que no muera y que en ocasiones, lo vestimos de gala.
David, en alguna ocasión, te vestirás de gala.
Si tu esfuerzo en los entrenos y sacrificios de la vida, te regalan algún día vivir el poder jugar un final o bien disputas algún partido donde se te haga protagonista, por ser una victoria no esperada.
Si eso ocurre, recuerda y no olvides nunca, que esas victorias mal gestionadas, son las que hacen que seas un verdadero perdedor en la vida.
Uno, tristemente se da cuenta del valor de esas palabras, de nuestros grandes maestros, cuando no comprende que nuestro deporte es simplemente eso. DEPORTE.
En la actualidad, los avances o eso dicen, pues creo que hemos catalogado de avances demasiadas cosas intrascendentes, hacen que veamos a niños como verdaderas copias de sus estrellas.
Y en la mayoría de casos, niños incapaces de analizar un partido de esos ídolos.
Y no puedo culparles a ellos.
Es la propia sociedad que argumenta que la enseñanza anterior es obsoleta y la actual la moderna.
Y terminare con una sola reflexión personal.
En la enseñanza, catalogada de antigua, había una serie de clases que no se ensañaban y que todos los alumnos teníamos clarísimas.
LA DE LOS VALORES, con esas clases nos hicimos deportistas.
Y en la actualidad esos VALORES, a los niños se les supone.
En la actualidad miro mi deporte desde fuera de la pista, los proyectos que se me ofrecieron, solo me acercaban a complacer a directivos de clubes o bien a padres que en su faceta de tales, se convencieron que ser Monitor de Tenis, era un curso sencillo de realizar, simplemente mirando la tele.
En esa disyuntiva me encontré.
Y para ser fiel a mi forma de interpretar la enseñanza, prefiero ver como del engaño no formo parte.
Simplemente quería enseñar un tenis sin confusiones, donde si un niño no es capaz de reír, me indicara que yo no estaba haciendo bien algo.
No creo en niños tenistas, creo en niños que practican tenis.
Pronto saldrá un libro del "Otro tenis".
Un libro que se empezó a parir, hace algún que otro año.
Con la esperanza de que se tuviera que borrar todo, al estar obsoleto y de alguna forma las palabras escritas, fueran irreales mirando el tenis actual.
Y, tristemente me temo que no es así, nuestro tenis retrocede y se sigue vistiendo de egos de aquellos que pocas veces entran en una pista y si lo hacen es para cerrar algún mal negocio.
Mi sorpresa, ha sido encontrar para este proyecto a maravillosos monitores y entrenadores de tenis.
Que al leer el borrador han decidido formar parte de el.
No tengo palabras para agradecer su implicación, aunque me entristecía al enviarlo, cuando debía decirles que entendía no participaran.
Y a otros que colaboraron para que yo no detuviera mis dedos al escribir, pues con su día a día me enseñaron, que mi visión de este deporte podía mejorar.
Existen ellos dentro de una pista, y sin decirles nada, buscan el corazón del niño en cada clase.
Incluso sacrificando el suyo.
Comprendo lo que puede suponer que este libro vea la luz por este mundo de la raqueta.
Este libro, pretende contar un Tenis, donde en cada golpe a la pelota dispara un trocito del corazón del alumno y su entrenador.
Y no olvida tampoco, aquellos que se lucran de este maravilloso deporte de la raqueta sin pensar en nada más que en ellos mismos.
A todos vosotros Rubén, Ramón, Carmen, Oriol, Tomas, Señor Pérez, Papa, Mama, Jordi, Rudi, por lo que me habéis aportado a mi vida dentro y fuera la pista, GRACIAS.
Y a todos aquellos que de alguna manera algún día he tirado alguna pelota, niños y adultos, solo deciros que gracias a vosotros, estoy delante de este escrito.
Solo Cuento Cosas
de David Creus Carrasco,
Ahora, después de muchos años gritando y gritando que los niños que practican tenis, lo ampliaría a muchos más deportes de base, merecían mucho más.
Mi garganta, ya no me deja expresar aquellas palabras descompuestas que un día me llevaron por un viaje de decepción, al ver el resultado de las mismas.
Durante muchos años, unas veces desde dentro de las pistas lanzando bolas y otras desde fuera, acompañando a los enanos para darles un alivio emocional en sus partidos, descubrí que esto del tenis era maravilloso para formar deportistas y sobre todo personas.
Mi entrenador, el Señor Pérez, (descanse en Paz), cuando yo intentaba imitar a mis ídolos de la época, siempre me decía que el tenis era un maravilloso ejemplo para ser simplemente mejor persona.
Siempre intentaba hacerme ver, que todo lo que envolvía una buena victoria, era como cuando se adorna en estas fechas un árbol de navidad.
Un abeto es un abeto, un árbol que debes cuidar todo el año para que no muera y que en ocasiones, lo vestimos de gala.
David, en alguna ocasión, te vestirás de gala.
Si tu esfuerzo en los entrenos y sacrificios de la vida, te regalan algún día vivir el poder jugar un final o bien disputas algún partido donde se te haga protagonista, por ser una victoria no esperada.
Si eso ocurre, recuerda y no olvides nunca, que esas victorias mal gestionadas, son las que hacen que seas un verdadero perdedor en la vida.
Uno, tristemente se da cuenta del valor de esas palabras, de nuestros grandes maestros, cuando no comprende que nuestro deporte es simplemente eso. DEPORTE.
En la actualidad, los avances o eso dicen, pues creo que hemos catalogado de avances demasiadas cosas intrascendentes, hacen que veamos a niños como verdaderas copias de sus estrellas.
Y en la mayoría de casos, niños incapaces de analizar un partido de esos ídolos.
Y no puedo culparles a ellos.
Es la propia sociedad que argumenta que la enseñanza anterior es obsoleta y la actual la moderna.
Y terminare con una sola reflexión personal.
En la enseñanza, catalogada de antigua, había una serie de clases que no se ensañaban y que todos los alumnos teníamos clarísimas.
LA DE LOS VALORES, con esas clases nos hicimos deportistas.
Y en la actualidad esos VALORES, a los niños se les supone.
En la actualidad miro mi deporte desde fuera de la pista, los proyectos que se me ofrecieron, solo me acercaban a complacer a directivos de clubes o bien a padres que en su faceta de tales, se convencieron que ser Monitor de Tenis, era un curso sencillo de realizar, simplemente mirando la tele.
En esa disyuntiva me encontré.
Y para ser fiel a mi forma de interpretar la enseñanza, prefiero ver como del engaño no formo parte.
Simplemente quería enseñar un tenis sin confusiones, donde si un niño no es capaz de reír, me indicara que yo no estaba haciendo bien algo.
No creo en niños tenistas, creo en niños que practican tenis.
Pronto saldrá un libro del "Otro tenis".
Un libro que se empezó a parir, hace algún que otro año.
Con la esperanza de que se tuviera que borrar todo, al estar obsoleto y de alguna forma las palabras escritas, fueran irreales mirando el tenis actual.
Y, tristemente me temo que no es así, nuestro tenis retrocede y se sigue vistiendo de egos de aquellos que pocas veces entran en una pista y si lo hacen es para cerrar algún mal negocio.
Mi sorpresa, ha sido encontrar para este proyecto a maravillosos monitores y entrenadores de tenis.
Que al leer el borrador han decidido formar parte de el.
No tengo palabras para agradecer su implicación, aunque me entristecía al enviarlo, cuando debía decirles que entendía no participaran.
Y a otros que colaboraron para que yo no detuviera mis dedos al escribir, pues con su día a día me enseñaron, que mi visión de este deporte podía mejorar.
Existen ellos dentro de una pista, y sin decirles nada, buscan el corazón del niño en cada clase.
Incluso sacrificando el suyo.
Comprendo lo que puede suponer que este libro vea la luz por este mundo de la raqueta.
Este libro, pretende contar un Tenis, donde en cada golpe a la pelota dispara un trocito del corazón del alumno y su entrenador.
Y no olvida tampoco, aquellos que se lucran de este maravilloso deporte de la raqueta sin pensar en nada más que en ellos mismos.
A todos vosotros Rubén, Ramón, Carmen, Oriol, Tomas, Señor Pérez, Papa, Mama, Jordi, Rudi, por lo que me habéis aportado a mi vida dentro y fuera la pista, GRACIAS.
Y a todos aquellos que de alguna manera algún día he tirado alguna pelota, niños y adultos, solo deciros que gracias a vosotros, estoy delante de este escrito.
Solo Cuento Cosas