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Lourdes Domínguez, 1ª gallega del «top 100» de la WTA

Pontevedra, 06/10/2005.- Lourdes Domínguez, la primera gallega del «top 100» de la WTA

El lucense Óscar Burrieza, mejor gallego en la historia de la ATP, llegó a escalar hasta el puesto 136 de la clasificación mundial.

En el tenis femenino la pontevedresa Lourdes Domínguez puede enorgullecerse de ser la pionera, la que logra figurar entre las cien primeras de la WTA (ránking femenino). Esta semana aparece en el puesto 90. «A principios de año me había marcado como objetivo colocarme entre las cien mejores del circuito. Conseguida esa meta, ahora mi reto para el 2006 es tratar de hacerme un hueco entre las 50 mejores», dijo la gallega.

Esta temporada ha conseguido adjudicarse el título en el torneo de Rimini (Italia) y también fue finalista en Bogotá, Líbano y Oporto. ¿A qué se debe su notable progresión? La tenista entiende que se ha superado psicológicamente. Ha trabajado como nunca con su entrenador Karin Perona, que comparte con la mallorquina Nuria Llagostera, y a base de ensayar casi constantemente sus golpes se han consolidado. Dispone de un saque mucho más contundente, su derecha impulsa la bola con suficiente velocidad y cree que necesita afianzar su golpe de revés, «con el que trato de imitar, de alguna manera, el que desarrolla la belga Justine Henin», afirma. La bola golpeada por Lourdes vuela a extrema rapidez, lleva efecto y les causa problemas a las adversarias. «Además me siento fuerte física y técnicamente y ahora tengo una gran confianza en mi juego», señala.

Reconoce haber madurado, «como persona y como jugadora y eso, que duda cabe, contribuye a serenar mi tenis y a hacerlo más complicado para las rivales». Lleva cuatro temporadas bajo la batuta de Karin Perona «y en ese tiempo he podido asimilar todo aquello que me ayuda a evolucionar como profesional».

No oculta que verse en el puesto 90 de la clasificación mundial la reconforta, «aunque insisto en que puedo llegar mucho más arriba; sé que tendré que sacrificarme mucho, pero daré todo el esfuerzo por bien empleado si alcanzo en el 2006 esa nueva meta».

Por el solo hecho de figurar entre las cien mejores de la WTA tendrá acceso directo a las pruebas de Gran Slam. Ya piensa en el Open de Australia. Este año, en esa competición, cayó derrotada en la segunda ronda de la previa. Implicada esta semana en el torneo de Barcelona, avisa de que todavía le quedan por delante las competiciones de Sevilla y San Cugat, aunque no descarta acudir en diciembre a la cita de Dubai. También revela que su profesión, en la que ahora va escalando posiciones, es de las que a veces «te quita las ganas de jugar si ves que los golpes no te salen como quieres», pero en su caso gracias a la colaboración de Perona ha podido superar los momentos desfavorables hasta meterse en el camino que conduce a las satisfacciones.

De esta temporada resalta su acceso a la final del torneo de Bogotá (Colombia) en la que se vio superada por la italiana Flavia Penetta, la novia del mallorquín Carlos Moyá. Claro está que su triunfo en la final de Rimini también le llena de orgullo.

José María Guimaraens /La Voz de Galicia